martes, 22 de marzo de 2011

De regreso a desahogarme...

Recurrentemente pienso el por qué esperar los momentos de inestabilidad para caer en cuenta de las cosas que se vienen haciendo mal. Esto ocurre en los tres campos vitales que son nuestra base de felicidad como personas: salud, dinero y amor. Se dice que cuando alcanzamos el equilibrio entre estas tres se puede gozar de plenidad y de una paz sostenida, siempre y cuando sean cultivado constantemente, porqué tambien es cierto que como un tripode es necesario para su buen funcionamiento que ninguno de sus pilares este en menor condición que sus similares.

Paradójicamente por muy enamorado que esté la facilidad que tengo para escribir una buena carta de amor es inversamente proporcional a lo correspondido que sea con ese gran sentimiento. Sentir que tengo amor para dar pero no un receptor con un buen retorno aflora en mi ese deseo insoportable de agradarle para ganarme ese ministerio haciendo cosas que nunca imaginé hacer. En todo caso esta es la crónica de una muerte anunciada.

El hecho es que en estos días estoy jodido y pienso descargar toda mi frustación consignadola en este blog.

Despues de algún tiempo de abandono regreso con otro "desamor", musa indefectible de mi inspiración...

No hay comentarios: